Este domingo 16 de febrero de 2025, el mundo del espectáculo mexicano perdió a una de sus figuras más emblemáticas: Yolanda Ivonne Montes Farrington, conocida artísticamente como “Tongolele”. La destacada bailarina y actriz falleció a los 93 años a causa de un infarto.
Nacida el 3 de enero de 1932 en Spokane, Washington, Estados Unidos, Tongolele mostró desde temprana edad una inclinación natural hacia la danza. De padre mexicano y madre estadounidense, comenzó su formación artística en el Ballet Internacional de San Francisco, donde se especializó en danzas tahitianas. A los 14 años, decidió trasladarse a México, país que la adoptaría como una de sus máximas exponentes del baile exótico.
Su llegada a México marcó el inicio de una prolífica carrera en los principales cabarets y teatros de la Ciudad de México, como el famoso Cabaret Tívoli. Su nombre artístico, “Tongolele”, surgió de la combinación de palabras africanas y tahitianas, reflejando la fusión cultural presente en sus interpretaciones. Con su inigualable estilo y presencia escénica, rápidamente se convirtió en un ícono del entretenimiento nocturno de la época.
El talento de Tongolele trascendió los escenarios y la llevó al cine durante la Época de Oro del cine mexicano. Debutó en la pantalla grande en 1948 con la película “Nocturno de amor”, compartiendo créditos con la actriz Miroslava Stern. Ese mismo año, protagonizó “¡Han matado a Tongolele!”, dirigida por Roberto Gavaldón, donde interpretó a una bailarina exótica envuelta en una trama de misterio y suspenso. Su participación en filmes como “El rey del barrio” (1949) y “Kill Me Because I’m Dying!” (1951) consolidó su fama y la posicionó como una de las artistas más solicitadas de su tiempo.
A lo largo de su extensa trayectoria, Tongolele incursionó en diversos géneros cinematográficos, incluyendo el cine de terror con películas como “The Panther Women” (1967) e “Isle of the Snake People” (1971), esta última compartiendo escena con el legendario actor Boris Karloff. Además, su versatilidad la llevó a participar en telenovelas como “La pasión de Isabela” (1984) y “Salomé” (2001), demostrando su capacidad para adaptarse a distintos formatos y públicos.
En el ámbito personal, contrajo matrimonio en 1956 con el cubano Joaquín González, con quien tuvo dos hijos gemelos. Su unión perduró hasta el fallecimiento de González en 1996. A pesar de los desafíos personales y profesionales, Tongolele mantuvo una presencia constante en el mundo del espectáculo, participando en producciones teatrales hasta 2013.
La partida de Yolanda Montes “Tongolele” deja un vacío en la cultura mexicana, pero su legado perdurará como símbolo de talento, pasión y dedicación al arte. Su influencia en la danza y el cine continúa inspirando a nuevas generaciones de artistas que ven en ella un ejemplo de excelencia y perseverancia.