Todas las historias que se originan del Holocausto son impactantes, todas merecen ser contadas. Sin embargo, en el cine, siempre se ha dado como una misma estructura para representarlas, por eso es interesante cuando los creativos usan otros recursos narrativos y estilísticos para desarrollar estas historias de vida, como es el caso de la de Stella Goldschlag, una mujer alemana y judía que desde septiembre de 1943 hasta el final de la guerra, entregó a cientos de compatriotas judíos a la Gestapo.
El director Kilian Riedhof se acerca a la vida de esta mujer para ofrecer un retrato que no juzga, pero que sí evidencia las razones y los intereses que llevaron a esta mujer a convertirse en un verdugo después de haber sido víctima de la propia guerra.
Stella crece en Berlín durante el régimen nazi. A pesar de todas las medidas represivas, sueña con una carrera como cantante de jazz. Después de verse obligada a esconderse con sus padres en febrero de 1943, su vida se convierte en una tragedia culpable. Por traición, es capturada por la Gestapo, luego de ser torturada se convierte en una “captora” para salvarse a sí misma y a sus padres de la deportación a Auschwitz, es así que Stella comienza a traicionar sistemáticamente a otros judíos.
El filme muestra las ganas de vivir de una mujer que en plena juventud está experimentando su sexualidad y el amor, por lo que resulta trágico que se le corten las alas por el hecho de ser judía y estar perseguida por el régimen nazi, coartando su libertad. Sin embargo, una vez que experimenta este deseo excepcional por vivir, no está dispuesta a perder eso que ha ganado y comienza a convertirse en parte del problema traicionando a otros judíos para poder sobrevivir y llevar la vida que imaginó aunque sea en cautiverio, como los aves enjauladas.
Poco a poco veremos como la candidez de Stella se transforma en miedo, convirtiéndose en una mujer perversa que luego se mostrará arrepentida tomando una decisión fatídica. El trabajo actoral de Paula Beer es impresionante, interpretando a una mujer llena de contrastes y dimensiones. Su compañero de reparto Jannis Niewöhner como “Rolf Isaaksohn” también es brutal, es el compañero, aliado y amante de Stella en esta travesía que se adhiere de una relación tóxica y pasional entre los dos. Vale mucho la pena ver este filme.