Una de las figuras clave de la literatura diversa y queer es Pedro Lemebel, quien aún después de su muerte, deja un legado que sigue permeando en la audiencia latinoamericana. “Tengo miedo torero” es la única novela del autor chileno y ésta ha sido adaptada al cine por el director Rodrigo Sepúlveda Urzúa, quien también participa en el guion junto con Juan Elías Tovar.
El filme tuvo su estreno el pasado 23 de noviembre en el marco de la novena edición de Premio Maguey que se desarrolla dentro de las actividades del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG). La trama de esta película se contextualiza en la turbulencia política de la dictadura de Pinochet en el Chile de los años 80, donde una vieja y pobre travesti se involucra en una arriesgada operación clandestina tras enamorarse de un guerrillero que le pide ocultar en su casa peligrosos secretos de la resistencia.
“La loca del frente” es interpretada por el actor Alfredo Castro, a quien Lemebel le encomendó el personaje años atrás, para el autor no había mejor histrión que él para desarrollar este papel tan lleno de matices. Cuenta en entrevista el director que el proyecto fílmico se desarrolló en cuatro años y ahora ha comenzado su travesía por diversos festivales mientras se toman las decisiones óptimas para su llegada a las salas de cine.
“Cuando Lemebel escribió ‘Tengo miedo torero’, que es su única novela, él siempre dijo que pensaba que ésta era un guion cinematográfico, y antes de morir, alcanzó a hacer un primer tratamiento y quería que la novela se transformara en una película. Es más, él llamó a Alfredo Castro y le dijo que él sería el protagonista”, cuenta el director, quien resalta además que este filme es una coproducción entre Chile y México.
En tanto, cuando estaban listos para llevar a cabo el proyecto, tuvieron varios desafíos, “uno era no caer en el cliché del viejo homosexual, sino que retratar la pobreza y la diversidad de su vida como está retratada en la novela, lo otro que para mí fue súper importante y determinante haciendo la adaptación, es que en un momento se menciona al terremoto y me pongo a investigar y claro, había sucedido un terremoto en Santiago de Chile y todo el barrio poniente que es donde ocurre la novela, estaba en el suelo y me pareció una profunda metáfora de cómo era la sociedad chilena (de ese tiempo) y recogí eso. Y en general se tiende a mirar el pasado desde una cosa como pintoresca y un poco agradecida y este pasado que queríamos mostrar era un Chile en dictadura con toque de queda”.
El actor mexicano Leonardo Ortizgris interpreta al guerrillero del cual se enamora “La loca del frente”. “Fue algo muy rico trabajar con Alfredo Castro, fue muy generoso y me dio muchas libertades para poder presentar yo mi propuesta como personaje y nos conectamos muy bien. Me parece que Alfredo Castro es uno de los actores latinoamericanos más importantes de estos tiempos y estuve admirando, jugando y aprendiendo en mi relación con él”.
Destaca el director que “La loca del frente” representa la peligrosidad que era ser homosexual en un país latinoamericano en la década de los 80, sin embargo, también se muestra la fragilidad y timidez del personaje, con mucho miedo de abrir su corazón por última vez. “Para ella conocer a ‘Carlos’, quien es 30 años menor, era vivir por última vez una gran y tremenda historia de amor”.
Finalmente, Diego Martínez-Ulanosky, el productor de la cinta, recordó que ésta se estrenó en Venecia y a partir de esta experiencia se les abrieron las puertas en otros festivales como en Corea, Egipto, Grecia, Noruega, Suiza y Santiago de Compostela, y ahora llegaron a Guadalajara; la cinta continuará con su recorrido.
A la par de la exhibición del filme en la ciudad, se realizó una exposición con 12 artistas latinoamericanos de Chile, Argentina y México que han reinterpretado el poster de la cinta, entre otros creativos destaca Fabián Cháirez, conocido internacionalmente por su “Zapata gay”.
Imagen, cortesía de Sebastián Utreras.