Se acerca el Día del Niño y, aunque la mayoría de los pequeños tendrán que pasarlo en casa, no debe de ser motivo para que pase desapercibido. Los papás tienen el reto de encontrar actividades divertidas para los más pequeños de la casa.
Pero no desesperen, papás, en Devir han elaborado la guía perfecta para pasar un Día del Niño espectacularmente divertido. En donde encontrarán las mejores opciones para que sus hijos se entretengan y se diviertan, no solo ese día, sino muchos más.
Además de que les darán la oportunidad de convivir con ellos, pasar un excelente tiempo juntos y ¿por qué no? Seguir jugando aun cuando los pequeños se han ido a dormir porque estos juegos son diversión para todas las edades.
Sin más introducción, aquí tienen la Guía perfecta para pasar un día del niño espectacularmente divertido:
Escalera Encantada. Excelente juego que reta nuestra memoria al tratar de llevar unos niños hasta la parte más alta de una espeluznante escalera encantada, que a lo largo de su trayecto los disfrazará de fantasmas para tratar de engañar a los demás y así ayudarlos a llegar a la cima.
Fantasma Blitz. Divertido juego en el que nuestra capacidad de observación y velocidad nos permitirán ser el primero en tomar el objeto correcto que un travieso fantasma llamado Balduin nos pide mediante cartas que no siempre muestran las cosas como son.
Laberinto Mágico. Emocionante juego en el que somos aprendices de magos y nuestro maestro nos manda a recolectar los ingredientes para una pócima en un laberinto. Solo hay un problema: el laberinto es mágico y las paredes son invisibles, por lo que deberemos aprendernos el camino correcto para evitar chocar con estos muros que no podemos ver.
Monstruo de Colores. Encantador juego cooperativo en el que nuestra tarea como equipo es ayudar a un monstruo a entender sus emociones. Para esto las iremos recolectando y trataremos de guardarlas en el frasco correcto, no sin antes platicar de algún momento en el que sentimos esa emoción en nuestra vida para dejárselo muy claro al monstruo.
Como ven, las opciones para pasar un día del niño más que divertido no faltan. Así que aprovechen y hagan que sus hijos, sobrinos, nietos pasen un día increíble jugando. ¡Mejor aún si es con ustedes!
Si quieren saber dónde pueden adquirir estos y muchos juegos más, visiten los puntos de venta de Devir para que encuentren el más cercano a ustedes y empiecen a jugar.
Recuerdos de la infancia
La infancia es una época especial; la mezcla de sabores, olores y aventuras que hacen de esos recuerdos unos de los más atesorados, recuerdos de una época libre de preocupaciones y responsabilidades que lleva consigo la vida adulta.
En nuestra mente, la infancia suele ser una época mejor y algo que la enmarca es la emoción que sentíamos por jugar con nuestros amigos, la emoción de correr por el parque, la emoción de imaginar mundos con nuestras figuras de acción y, por supuesto, la emoción de compartir una tarde de juegos de mesa.
Como adultos, la vida nos ofrece nuevas emociones, nuevos sabores y aventuras, pero siempre está en la mente el recuerdo de la infancia y muchos buscamos cualquier oportunidad para revivirlo. Quizás sea difícil pensar en jugar a escondernos en el parque o nos parezca poco prudente tirarnos en la tierra a jugar con muñecos, pero eso no significa que el jugar pierda su magia solo porque pasaron los años, sino que una buena tarde de juegos de mesa con nuestros amigos definitivamente nos hará recordar ese tiempo en el que éramos muy felices, no teníamos grandes preocupaciones y podíamos pasar toda la tarde jugando.
Pero el tiempo no se detiene y así como nosotros hemos crecido, el mundo ha cambiado y los juegos de mesa han mejorado también. Atrás quedaron esos sencillos juegos que, si bien nos dieron muchas horas de diversión, poco lograrían emocionarnos hoy en día.
Hoy, esa alegría la encontramos en juegos que nos retan. Juegos como CATAN, un verdadero clásico moderno que mezcla la estrategia, la suerte y nuestra habilidad de negociación para lograr tener el asentamiento más próspero en la isla. O como UBONGO en el que debemos utilizar nuestro ingenio y nuestra velocidad mental para acomodar las piezas de manera correcta y ganar gemas que nos darán la victoria.
Otra opción es KING OF TOKYO, que nos convierte en un monstruo gigante que pelea por dominar la desafortunada capital japonesa. Aquí tiraremos dados y decidiremos cuáles usar para hacer daño a nuestros contrincantes o adquirir nuevos poderes o acumular puntos con tal de ganar y ser declarados reyes.
También tenemos ENSALADA DE PUNTOS, un juego muy divertido en el que competiremos por tomar cartas de ingredientes del centro de la mesa, las cuales nos darán opciones distintas para ganar puntos. De nuestro ingenio para combinarlas dependerá salir victoriosos.
En CARCASSONNE, un sencillo, pero muy estratégico juego, colocaremos losetas para ir formando un reino con ciudades, campos y caminos, tratando de completar construcciones y reclamarlas con nuestra gente para obtener puntos.
Finalmente, una excelente opción para recordar esas aventuras de la infancia la encontramos en OUT OF THIS WORLD, un juego cooperativo (es decir o ganamos todos o perdemos todos), en el que la nostalgia de los 90’s nos pone en el papel de unos niños que exploran escenarios llenos de monstruos y criaturas sobrenaturales buscando cumplir objetivos específicos que nos permitirán derrotarlos, todo esto mientras los adultos ni se dan cuenta de lo que está pasando. Algo que complica el reto es que solamente un jugador tiene permitido hablar cada ronda.
En fin, las opciones son más de las que puedo nombrar en este espacio, pero cada una de ellas nos hará recuperar un poco de esa magia y asombro de otra época y nos hará vivir por un momento nuevamente la emoción de jugar como cuando éramos niños. ¿Lo mejor de todo? Podemos hacer esto una y otra vez cada vez que decidimos sacar nuevamente el juego a la mesa.
Con información e imagen de Devir.