La actriz Daniela Schmidt además de protagonizar “Ocho de cada diez” con Noé Hernández, también funge como productora de esta película que retrata la marginación y la impunidad que se vive en un lugar como la Ciudad de México. Daniela interpreta a una mujer que ha sido víctima de violación, maltrato y demás vejaciones, pero que a pesar de las vicisitudes, busca la manera de salir adelante, con dignidad y valentía.
El trabajo de mesa lo hizo con el director de la cinta Sergio Umansky, quien le brindó material con relatos e historias de mujeres que pasaron por lo que su personaje. “Cuando a ti te llega un personaje al que le pasan cosas tremendas, hay una tendencia natural a victimizarlo. Y la consigna con Sergio era hacer a personajes dignos, esa fue la parte más importante y neural de mi personaje, que era construir a ‘Citlali’ no desde la victimización, sino desde la dignidad”.
En la trama “Aurelio” (Noé Hernández) y “Citlali” se conocen en un pequeño hotel de la Ciudad de México en el momento más oscuro de sus vidas. Él acaba de sufrir la pérdida de su hijo asesinado a plena luz del día; ella es una inmigrante que tuvo que abandonar a su hija con su violento padre.
Mientras que su búsqueda de justicia pronto se transforma en deseo de venganza, una relación afectiva empieza a crecer poco a poco entre ellos. Retomando la estadística de que ocho de cada diez asesinatos en el país no se investigan, el realizador Sergio Umansky ofrece una historia que denuncia la corrupción, la violencia y la injusticia en una sociedad donde el amor es la única forma de esperanza para soportar la terrible realidad.
“Hay mucha gente viviendo en circunstancias muy complicadas y complejas, es el caso de ‘Citlali’, quien es víctima de tráfico y que además está casada con su traficante, quien es el padre de sus hijos; la situación pone color de hormiga a esta mujer. Pero es inspirador cómo reúne toda esta fuerza para dejar a su abusador y venir a buscar ayuda, no cualquiera, muchas mujeres a veces no encuentran el fuego interno para salir corriendo y abandonar a su abusador”, expresa Daniela.