Hace unos meses Vicente Fernández, “El Charro de Huentitán”, se convirtió en un blanco de memes, luego de las declaraciones que le dio al periodista de espectáculos Gustavo Adolfo Infante donde compartió que ante un posible trasplante de hígado, hubiera el resquemor de que fuera de alguien homosexual o de alguien que tuviera alguna adicción.
Dichas palabras se hicieron virales inmediatamente y el cantante se hizo tendencia, pero tiempo al tiempo, y en el marco de la develación de su estatua ecuestre en la Plaza de los Mariachis de Guadalajara ayer domingo por la tarde, Chente aclaró a su modo lo sucedido.
“A veces uno habla… yo iba inconsciente cuando el problema ese, yo iba sedado y dije, pero yo tengo muchos amigos gays y me siento muy orgulloso porque al fin y al cabo todos somos humanos, y eso, manda allá arriba, no nosotros; unos nacen otros se hacen, pero al fin y al cabo son seres humanos”. Dijo además que quería hacerlo de manera pública y no ante una cámara para que luego se vendiera como exclusiva.
Chente cantó ante 65 mil personas en un concierto gratuito en la explanada del Instituto Cultural Cabañas a manera de agradecimiento a su público tapatío por tantos años de seguir de cerca su trayectoria, interpretó 15 canciones, esto fue algo muy significativo, pues desde su retiro de los escenarios en 2016, no había vuelto a cantar en vivo hasta ahora. El Gobierno de Jalisco y el Ayuntamiento de Guadalajara, fueron las instituciones que le organizaron el merecido reconocimiento. La escultura es del artista Jorge Frausto Arias.
Imágenes y video, del Ayuntamiento de Guadalajara.
