Sí, ya sé que cancelaron “AJ and the Queen” y solo habrá esta primera y única temporada que hizo Netflix junto con Warner, pero quería hacer el review porque sí me gustó y soy fan de RuPaul, aunque también soy objetivo y puedo entender por qué no le llamó la atención tanto al público, siento que el humor y el formato son muy antiguos, muy al estilo de las series noventeras, a pesar de que su contexto era la actualidad, la trama sí se sentía vintage.
Las actuaciones también eran muy fársicas, muy del estilo de la vieja escuela de RuPaul, que tal vez por eso no conquistó a su base de seguidores más jóvenes. También considero que el personaje de “AJ”, interpretado por Izzy G. es muy antipático, entiendo que es una niña en situación de calle cuya madre tiene problemas con las drogas y de ahí que mantenga una constante ira, pero no hubo matices, iba a contracorriente, porque todos los personajes eran mucho más ligeros, incluido “Ruby Red” (RuPaul), que no se encontró un punto de equilibrio.
Para quienes no han visto la trama “Ruby” es una drag queen que ha estado ahorrando todo lo que puede para abrir su propio bar y hacer sus números musicales, se ha hecho de un novio (Josh Segarra) con quien planeaba le administrara el lugar, pero no contaba con que éste la estafaría dejándola en la calle. En su edificio tiene una vecina –“AJ”– que la está pasando mal, no sabe dónde está su madre y prácticamente vive en situación de calle. “Ruby” necesita volver a trabajar y emprende una gira por las ciudades de Estados Unidos a bordo de su camioneta, pero se ha colado “AJ” y juntas vivirán divertidas y extrañas aventuras.
Me encanta que casi todas las ex concursantes de “RuPaul’s Drag Race” estén en los episodios, eso le da mucha vida a la trama que peca de sentirse antigua, por otro lado, Josh Segarra es la cereza del pastel, no solo representa al sex symbol en la historia, además está muy divertido, es quien le pone la sal y la pimienta.
Los vestuarios son bellísimos, obviamente porque son de mamá Ru, pero ese aire retro que tiene la trama, que a mí no me molesta, es su principal adversario, pese a que uno de los creadores es Michael Patrick King, la mente detrás de “Sex and the city”. En fin, a veces no se puede tener todo en la vida, pero lo que sí es un hecho es que a Ru le ha ido de maravilla con su reality show.
