Luego de un periodo prolongado alejado de la música, Jaime Kohen está de regreso, desde una perspectiva equilibrada, pero muy emocional, donde se permite fluir, donde va a su ritmo y sin presiones. La carta de presentación es “Gigante”, cuyo videoclip también está disponible en YouTube. Esta canción formará parte de un álbum llamado “Espejos” del cual poco a poco Jaime estará revelando los temas que lo conforman.
Hablamos con él sobre el concepto de “Gigante”, cómo se llega a ser uno, cuáles son las responsabilidades que conllevan cuando lo logras. “Te conviertes en total responsable de ti mismo. Allá afuera ya no tienes a nadie a quién culpar: ni a una pareja, ni a un gobierno, ni a una familia, ni a un trabajo, eres responsable de tus acciones y tus decisiones, tomas la responsabilidad por ti y por tu ser, pero eso nos genera miedo y nos da miedo afrontarnos como gigantes, pero si tomamos toda esta responsabilidad, pues nos empoderamos aún nivel impresionante porque ya no habrá nada que te impida ser tú y expresarte con todo tu potencial”.
Subraya Jaime que para encontrarte con tu potencial, una actividad importante es la terapia. “Creo que para ser gigantes sí necesitamos atravesar por procesos. Tenemos tantas capas todos, conceptos aprendidos, patrones de nuestra familia y de la sociedad y demás, que nos impiden ser libres y auténticos. Siento que no es que nos vayamos a convertir en un gigante, ya lo somos desde niños, pero nos vamos cubriendo de todas estas capas, que hay que ir quitando los velos para conectar con nuestra esencia”.
En ese sentido, quienes somos parte de la comunidad LGBT tenemos un doble esfuerzo para mostrarnos tal cual somos, derivado de la sociedad en la que crecimos, para nadie es una tarea fácil, sin embargo reconoce Jaime que hay que atreverse a ser quien uno es para que entonces más personas se animen a ser ellos mismos también.
“Es un grato reto porque rompes con la forma tradicional que está tan presente sobre todo en países como México. Cuando yo me abrí que fue hace como más de 10 años, era otro panorama totalmente. Sí siento que ahora se han abierto más foros y espacios, mínimo en las ciudades principales de la República Mexicana, aunque estoy consciente de que sigue siendo un reto para países como el nuestro y Brasil donde hay más discriminación por ser tradicionales y religiosos. Entonces, sí creo que en el tema LGBT se requiere esta extra fuerza para convertirte en ti mismo. Sin embargo, creo que si lo asumes, buscando tu autenticidad y tu libertad, creo que eventualmente todas las piezas se acomodan y la gente que te ama de verdad se quedará cerca de ti, y la gente que no lo entiende, pues será muy doloroso, pero también es importante soltar, porque o podemos elegir entre vivir nuestra propia vida, o vivir la vida que los demás quieren que vivamos”.
Comparte Jaime que en algún momento de su vida sí se ha sentido frenado por defender su identidad, por eso es que también ahora desde la independencia puede tener las riendas de lo que quiere hacer y cómo lo va a mostrar, siempre defiendo lo que a él le gusta y le interesa que vean los demás. “Justamente la crisis más fuerte por la que atravesé en mi vida que fue la que me conectó al hacer música, fue cuando abrí mi orientación sexual con mi familia, yo vengo de un origen judeo-árabe. Entonces, este tema era súper complicado, ya ni digas si era malo o bueno, no existía, así que fue difícil para mí, pasé una depresión en la cual tuve que estar medicado durante varios meses, yo sí considero que fue la crisis más oscura de toda mi vida, porque era esa disyuntiva de ser yo mismo, o ser todo lo que los demás querían. Viví seis meses súper fuertes y ahí la música me ayudó muchísimo, me di cuenta del poder impresionante que tenía y saliendo de la crisis fue justo cuando quise hacer música, hacer por alguien más lo que ella hizo por mí, porque me salvó”.
También cuando comenzó su camino sonoro, se encontró con varios obstáculos, donde sí lo apoyarían en su propuesta, pero le pedían cambiar su concepto musical, o que sí podrían invertir en él, pero tal cosa no debería cantar, “inclusive me pasó que me decían que me apoyaban, pero que no podría abrir mi preferencia. Entonces, sí me han tocado varios retos en mi camino, pero ha valido toda la pena porque ahora vivo con autenticidad y libertad”.
Y desde este punto en el que se encuentra Jaime, donde tiene una voz que es escuchada, dice que sí siente una responsabilidad como figura pública de que otras personas se inspiren de lo que él hace para empoderarse. “Yo sí creo que hay que tomar mucha responsabilidad de lo que compartimos y más cuando decides ser una figura pública, porque todo lo que va a salir de tu boca o de lo que sea que compartas, le va a llegar a alguien. Por eso siempre he estado muy enfocado en lo quiero compartir, y a veces me frustra ver a tanta gente del mundo latino que todavía sigue sin compartir una preferencia u otro tipo de cosas que ayudarían muchísimo a que todo esto se vaya normalizando o abriendo, o tanta gente que se espera a ser súper famosa y no tener nada que perder, que digo, también es válido, no digo que no, pero sí no se me hace tan valiente”.
Jaime reitera que más allá de ser parte de la comunidad LGBT, a lo que él le canta es a la autenticidad y a la libertad, “lo que sea que eso signifique para ti, más a un nivel humano donde te atrevas a ser lo que tú quieras, por supuesto el tema LGBT es muy cercano a mí porque es mi realidad, pero mi intención es cantarle a la gente que se conecte con mi mensaje”.