Netflix nos ha dado grandes contenidos para cerrar el año y uno de ellos es la serie mexicana “La Flor Más Bella”, la cual es protagonizada por Esmeralda Soto, cuya trama está inspirada en la vida de la actriz Michelle Rodríguez. Esta es una historia fuera de lo común porque la protagonista no es para nada el arquetipo que estamos acostumbrados a ver en pantalla; la representación importa y es necesaria.
Y “La Flor Más Bella” es una maravilla porque es una celebración al amor propio, a estar orgullosos de quienes somos, aceptando y abrazando nuestras diferencias porque eso nos hace seres únicos. “Mich” (Esmeralda) es una adolescente con ganas de comerse el mundo y de que la gente note el brillo que tiene. No es rubia, no tiene un cuerpo hegemónico, pero es la más bella de Xochimilco, su lugar de origen, donde se veneran y se respetan tradiciones ancestrales.
“Antes las narrativas y las figuras que teníamos en el cine y la televisión, eran aspiracionales, como que eso es lo que deberíamos ser o lo que debía ser, y cuando tú te encontrabas en el espejo y en el camino, decías… ‘¡Ay, yo no soy eso, qué vamos a hacer!’. Entonces, nos sentíamos raros, nos sentíamos aparte, nos sentíamos excluidos, pero que me digan ‘yo también soy Mitch’, se cumple el cometido, porque somos los diferentes, a los que nos dijeron que no cabíamos, que no podíamos… que también soñamos, nos enamoramos, nos va mal y sacamos 10 y sacamos 0 y ponemos el cuerno o nos ponen el cuerno, somos todo y me encanta que podamos representarlo en la televisión porque creo que los medios necesitamos nuevas narrativas para que todos nos sintamos incluidos”, cuenta Michelle Rodríguez.
Además, en la trama el lenguaje inclusivo, la diversidad sexual y los valores familiares, se tocan de una manera natural, respetuosa y sincera, no hay pretensiones de ser políticamente correctos, por el contrario, se trata de ser seres humanos imperfectos con las ganas de salir adelante. Michelle Rodríguez funge como productora ejecutiva y Fernanda Eguiarte como creadora y guionista.
“Después de que Campanario y Netflix me buscan, empiezo a desarrollar esta historia con Fernanda Eguiarte, quien es la escritora del proyecto, hablamos muchas horas por Zoom y por teléfono –porque era la pandemia– para contarle toda esta historia. Ella también se enamora de Xochimilco y comenzamos a crear este universo con el que, cuando nos juntamos con los actores, ellos no solo estaban ávidos de contar esta historia, sino de vulnerarse con ella. Creo que sí estamos necesitando nuevas narrativas, no nada más como espectadores, sino también como creadores de contenido porque tenemos ganas de decirle al mundo que sentimos, que existimos, que resistimos y que queremos ser vistos y escuchados”.
En el elenco, además de Esmeralda Soto como “Mich”, también participan Isabel Yúdice como “Yadi”, Alicia Vélez como “Tania”, Michelle Olvera como “Brenda”, Germán Bracco como “Dani”, Tadeo Tovar como “Mati” e Ishbel Bautista como “Majo”. Michelle finaliza al decir que la producción es algo en lo que quiere seguir inmersa. “Profesionalmente es algo que siempre soñé. Entonces, estoy feliz de que me den esta oportunidad y de aquí pa´l real, yo no doy paso sin huarache”.