Sentirse solo en el mundo es un gran desafío por el que atravesamos todos en algún momento de nuestras vidas, es un proceso duro y difícil que se asimila mejor cuando en el camino nos encontramos a otros que atraviesan circunstancias similares. Y esta es una travesía que se representa muy bien en la película de Alexander Payne, “Los que se quedan”.
La cinta nominada a cinco premios Oscar como Mejor película, Mejor guion original, Mejor edición, Mejor actor para Paul Giamatti y Mejor actriz de reparto para Da’Vine Joy Randolph, nos presenta a tres protagonistas que no tienen nada en común entre sí, salvo su soledad.
Un profesor malhumorado (Giamatti) que huele a pescado, un adolescente problema (Dominic Sessa) y una cocinera que acaba de perder a su hijo (Randolph), se ven inmersos en un viaje que los conecta y los hace generar lazos afectivos.
Los tres se quedan solos en un colegio, en el cual el profesor labora, quien además, tiene que hacerse cargo de unos adolescentes que no podrán celebrar la Navidad con sus familias, por lo que tienen que convivir en la escuela; la cocinera, quien vive su duelo, se queda al servicio de la alimentación, sin embargo, cuatro de los cinco muchachos logran irse del suplicio de estar solos con su profesor y quien no corre con la misma suerte es “Angus”, el chico problema, quien con el paso de los días generará una gran amistad con sus “roomies”.
Paul Giamatti ofrece una cálida actuación a través de un profesor entrañable, el cual, claramente es repudiado por sus alumnos, pero que como espectadores generamos empatía con él, porque podemos conectar con sus miedos, lo mismo sucede con Da’Vine, quien representa a una madre adolorida que tiene la garra de salir adelante, pero que también se quebranta continuamente al saber que jamás volverá a ver su hijo de 19 años. Y Dominic, también representa a un joven cercano y tierno que afronta problemas familiares duros, donde se culpa a él mismo por la situación en la que se encuentra.
Esta es una cinta que a través de un humor ligero y amable, nos hace darnos cuenta que no estamos solos en el mundo.
SINOPSIS
Esta comedia ambientada en los 70 cuenta la historia de un profesor malhumorado (Paul Giamatti) en una prestigiosa escuela estadounidense en la que se ve obligado a permanecer en el campus durante las vacaciones de Navidad para cuidar de un grupo de estudiantes que no tienen a dónde ir. Con el tiempo, establece un vínculo inesperado con un problemático alumno (Dominic Sessa) y con la jefa de cocina de la escuela, que acaba de perder a su hijo en Vietnam (Da’Vine Joy Randolph).
