Vivimos en una sociedad donde si eres joven, tienes el derecho a equivocarte y si eres viejo, lo tienes prohibidísimo. Suponemos que alguien con experiencia ya no tiene más cosas por demostrar más que vivir de su legado, pero nos equivocamos, para eso tenemos a Madonna, quien a pesar de su trayectoria, sigue luchando contra los estereotipos sociales.
Desde hace unas semanas “La reina del pop” comenzó a brindarnos pinceladas de lo que es su disco de estudio número 14 –“Madame X”– la carta de presentación fue “Medellín” en colaboración con Maluma, la cual dividió opiniones, más negativas que positivas si echábamos un vistazo a Twitter.
Que de hecho, esta red social por estos días es la Santa Inquisición gracias a los puntos de vista de los usuarios en el mundo, algunos con criterio de por medio y otros tantos que creen que solo porque pagan su internet, sienten tener la razón en opiniones que abordan desde la ignorancia, pero esa es otra historia.
El pasado viernes 14 de junio “La reina del pop” le reveló al mundo todos los temas de su disco, 15 canciones donde hay un variopinto abanico de colores musicales donde sobresalen el reggaetón, el fado, el trap, el hip hop, los sonidos dance y electrónicos, pero bajo su estructura de siempre que es el pop. Las letras, como ya lo ha venido plasmando en álbumes anteriores, giran en varias directrices, la religión, el poder, el empoderamiento de la mujer, el orgullo gay, los marginados y la represión. Desde su música es activista y todos estos tópicos los arropa con su seducción, que ahora es la de una mujer madura que busca su propia voz, o seguirla reivindicando, en un momento donde la música está en constante cambio.
Madonna, quien ha vendido 300 millones de discos en 35 años de carrera, según cuenta la agencia AFP, dijo en estos días de promoción de su nueva música, “aquí he encontrado a mi pueblo y un mundo mágico de increíbles músicos, que han reforzado mis convicciones de que la música es el alma universal, conectada a través del mundo”. Y sus palabras están llenas de razón.
Sí, considero que “Madame X” no es el mejor disco de su carrera, pero tampoco tiene por qué serlo. Como público, creemos que el artista tiene la obligación de superarse a sí mismo en cada proyecto, pero no tiene por qué suceder así, porque sus intereses se sujetan a otras muchas cosas que solo le conciernen a nivel creativo y personal.
Las opiniones de los expertos giran en que Madonna quiso reinventarse tomando recursos de lo que está de moda y ajustándolos a su estilo para presentarlos como propios, y puede que sí haya sido así, pero, ¿quién no lo hace? El hilo negro no existe, desde que el mundo es mundo las fusiones son un elemento natural en el ser humano, las influencias nos anteceden y nos evolucionan.
Donde sí “La reina del pop” se podría estar equivocando es en querer demostrar algo que ya sabemos y que no necesita recordárnoslo, que es una revolucionaria. Porque sí, vivimos en un mundo donde si ella no nos dice constantemente que está trabajando y esforzándose, pensamos que ya está vieja y que no tiene nada nuevo que ofrecer, porque así somos de crueles, tal parece que si llegas a los 50 años eres invisible para el resto de los demás y peor aún si eres mujer, porque casi que se te quiere santificar.
Madonna tiene excelentes canciones en “Madame X” donde nos reencontramos con el sonido de “Music” y “Confessions on a Dance Floor” en temas como “God Control” y también “I Don’t Search I Find”, esta última, para mí es mi rola favorita, el sonido gay que mi alma necesita.
“I Rise”, por ejemplo, es un tema para defender tus ideales, visibilizar a quienes nos hemos sentido marginados. “Esta año, celebramos los 50 años de la Marcha del Orgullo Gay y espero que este tema ayudará a cada uno a aceptarse y a asumirse tal y como es”, confesó Madonna en una entrevista, y así es lo es.
Con Anitta y Maluma sucumbe al reggaetón, con el colombiano grabó tres canciones, dos para “Madame X” y una para el álbum de él que se llama “11:11”, la más afortunada es la que está en el disco de Maluma, “Soltera”, pero “Bitch I’m Loca” y “Medellín” son ese tipo de melodías que a las tres reproducciones terminan por convencerte, sin embargo, donde se escucha espectacular Madonna es con Annita en “Faz Gostoso”.
El sonido americano y salvaje lo encontramos en “Crave” con Swa Lee, que es otro de mis temas predilectos y “Future” con Quavo. En “Dark Ballet” colabora en el videoclip con el rapero transgénero Mykki Blanco caracterizado como Juana de Arco en la hoguera, una narrativa poderosa y trasgresora.
“Madame X” fue un disco grabado durante año y medio en Portugal, Londres, Nueva York y Los Ángeles, es un material que a muchos no les gustará, pero a otros muchos sí, y así es esto, si Madonna tratar de darnos gusto a todos, no sería la mujer revolucionaria que hoy es y que dignamente le llamamos “La reina del pop”.