La realizadora Mar Novo ha desarrollado un cortometraje llamado “Mar I Ana”, basado en una experiencia personal. La historia es sobre “Mar” y “Ana”, dos mejores amigas desde la infancia, quienes buscan el lugar perfecto para la boda de “Ana”; no sin antes revivir su amor y su deseo reprimido por años.
Las protagonistas de esta narrativa son Daniela Fridman, Andrea Martí y Columba Díaz. Las locaciones se realizaron en Guachinango y Guadalajara en Jalisco. Conversamos con la directora acerca de esta aventura fílmica que representa un episodio de su vida.
“Este cortometraje lo hice con la intención de promover el largometraje, claro que es un corto hecho y derecho, no es que sea un teaser o una idea, está adaptado a la escena madre, la principal del largometraje y la intención con todo esto es festivalearlo, es dar como una primera instancia del público al que va dirigido”, resalta Mar que también es una propuesta ante la falta de contenido que existe en términos de diversidad aterrizados en el tópico lésbico, pues se percata que no solo en México existen pocas narrativas, también a nivel internacional.
“Sí vivimos en una cultura más machista, que día con día se está abriendo poco a poco”, pero que sigue teniendo un peso grande en la sociedad, por eso también de ahí la necesidad de desarrollar historias como esta, que más que ser de nicho, habla de amor, de una situación en la que todes y cada uno de nosotres nos podemos identificar, pues la mayoría se ha enamorado y ha atravesado por una ruptura.
“Mar I Ana” tendrá una participación en octubre próximo en el marco del décimo aniversario de Premio Maguey, que forma parte del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG). También es la intención que el corto se vea fuera de México, “es una buena oportunidad porque no hay muchas películas en Latinoamérica que sean específicamente sobre lesbianas. Esta película está basada en hechos reales, es mi historia y todas las escenas que pasan tanto en el corto como en el largo, son adaptadas a la ficción, pero son 100% reales, basadas en un evento de mi vida”.
Entre los retos que tuvo al desarrollar el proyecto, fue trabajar con la vulnerabilidad, “porque (exponerte) puede ser tan criticado como admirado. Duré 10 años en desarrollarlo (el corto), porque han pasado muchas cosas y es muy chistoso que este año se cumplen 10 años de Premio Maguey. Yo soy tapatía, viví siete años en Los Ángeles, allá estudié y trabajé, me regresé a la Ciudad de México donde grabé algunos largometrajes y apenas volví en marzo para hacer esto”.
Reitera que una historia como esta se une a la oferta de contenidos diversos, pero mostrando historias de mujeres, pues si bien en los últimos años han destaco filmes mexicanos como “Cuatro Lunas” o “El baile de los 41”, hay poca presencia de historias lésbicas, “siento que esta es una muy buena oportunidad, y más hablando de mi experiencia de primera mano, a pesar de que me voy a súper exponer, pero no importa porque ya no quiero que exista ese tabú, quiero que se pueda hablar de cualquier cosa, claro que existen pelis de personajes trans y no binarios, pero siento que falta un poquito más esa apertura hacia la audiencia, la cual es mi principal motivador porque es a la que quiero dar este mensaje”.
Además, las historias LGBT en cine y televisión se han mostrado desde un punto de vista de la salida del closet y narrativas que van más del dolor y la soledad, que son muy válidas e importantes, pero que también es necesario contarlas desde la naturalidad de la vida donde también hay amor y rupturas, sueños y metas en la vida, cosas cotidianas por las que todes atravesamos.
Finalmente, como anécdota, recuerda Mar que “Mar I Ana” se grabó en exteriores sobre todo en unas ruinas que ella encontró y que nadie más había descubierto, “será la primera vez que van a salir en pantalla; yo me fui a la colina a buscar al ejidatario fue como una misión, desde ahí fue súper mágico y ha sido una experiencia porque desde entonces la película se ha hecho sola. Estas ruinas en Guachinango, si tratas de verlas en Google Maps, están atrapadas por el bosque”, destaca que datan de la Revolución, ahí dos personas murieron por llevar oro a su familia, y “justo el subtexto de la película es como ese amor en ruinas”.
En la imagen, la directora con sus protagonistas. Cortesía.