La cantante y actriz Penny Pacheco tendrá concierto virtual el próximo 3 de octubre a las 20:00 horas a través de Zkope Livents, donde un porcentaje de lo recaudado será destinado a la asociación “Camina junto a mí”, la cual se dedica al cuidado de niños con síndrome de west. Adelanta que todo marcha en orden para dar un buen espectáculo a sus seguidores.
“Vamos bien, avanzando de manera congruente y con la energía adecuada para estos tiempos. Ahora todo parece estar a un ritmo más lento, pero creo que simplemente es un ritmo más sano. Nosotros ya queremos salir a jugar al escenario, a pasarla muy bien con ustedes y a sentirnos invencibles, necesario después de tanta vulnerabilidad que ha provocado el encierro”. Adelanta que tocará dos temas inéditos que pertenecen a un segundo disco que prepara.
Sobre cuál es el eje de éste hablando de sonido y propuesta, señala que tiene un carácter punk, “de decir lo que sentimos, de hacer lo que queremos y amamos, de trabajar con pasión y con un sonido definitivamente más concreto, mejor pensado, más diseñado, más melódico y nosotros más maduros como músicos, ejecutantes, cantantes, performers, o como creadores en la música así como me considero. Muy pronto lanzaremos un sencillo y el año que entra seguiremos con la dinámica de lanzamientos hasta tener un disco completo y sacarlo, si todo nos va bien, en vinil”.
En cuanto a cómo ha influido la pandemia en su desarrollo musical y creativo, señala que ha sido un proceso muy fuerte. “He cambiado mucho, me he mudado de varios vecindarios, de varios personajes, he podido limpiar mi interior para dejar lo esencial, he trabajado el desapego de una forma muy potente, he tratado de transformar la tristeza en algo eterno, etéreo y positivo; en arte, he estudiado, me he aprendido a conocer mejor como persona y personaje. Este segundo material tiene mucho de cómo estamos hoy, después de un evento tan fuerte a nivel mundial como ha sido esta pandemia, nadie podrá ser igual después del 2020”.
Sobre la retrospectiva de su trayectoria, la define como lúdica. “He salido a jugar al escenario, a trabajar súper poderes, a escribir páginas de mi libro personal que todavía nadie escribe, a saber escuchar para poder decir. He aprendido mucho de la generosidad al compartir mi música o cualquier tipo de obra artística con la gente, la generosidad que ellos tienen de recibirla y el amor que te dan a cambio. Además ha sido también muy generosa por parte de la música misma y del negocio, todos me han recibido con los brazos abiertos, con simpatía, empatía, no tengo ni un sólo día de mala experiencia en esta carrera”. Esto también influye en las lecciones que ha tenido como artista independiente.
“He aprendido sobre todo a decir con todas las letras que tengo una empresa entre mis manos, que yo misma construí con la ayuda de mucha gente; la necesidad de ser una buena líder, a ser disciplinada incluso cuando te la estás pasando muy bien; la responsabilidad de levantarte para escribir una página más de tu libro, que si no te levantas nadie te dice nada, pero tampoco nadie nunca dirá nada de tu obra… así que el aprendizaje es enorme, es aprender a gestionar tu vida”.
Finaliza al decir que también le interesa hacer teatro, “estoy sobre el proceso de producción de una nueva obra de teatro que Jaime López y yo escribimos a partir de la obra de Fernando Arrabal”.