Disney nos ofrece una adaptación cinematográfica de la novela de Madeleine L’Engle “A Wrinkle in Time” –para el público latino, “Un Viaje en el Tiempo”– y el resultado es una película muy entretenida que disfrutarán chicos y grandes. La primera parte es divertida, tierna y encantadora, pero después se va tornando sosa y un tanto obvia.
La directora Ava DuVernay quien en el pasado entregó un filme poderoso con “Selma”, esta vez entrega una historia que cumple, pero que hubiera podido ser menos Disney y más realista, porque vaya que sí tiene momentos intensos.
Aunque es una cinta de fantasía y aventuras donde converge el universo científico, con el astronómico y hasta la ciencia ficción, la directora aborda temáticas muy actuales en los adolescentes, como el acoso, la baja autoestima y la depresión, características que tiene su personaje central “Meg” encarnada por Storm Reid, de hecho en ciertos momentos el rol llega a ser chocante, en lugar de entenderlo, pides a gritos que reaccione y justo cuando no crees que va a pasar, la directora le da la vuelta y entonces crea empatía.
“Meg” viaja en el tiempo y el espacio para encontrar a su papá “Mr. Murry” –Chris Pine– un científico que se ha perdido por más de cuatro años, a quien la directora lo retrata como un ser imperfecto y no como un padre modelo a seguir, esa es una premisa muy interesante, porque en realidad muestra su naturaleza humana y no el típico estereotipo del papá de las historias rosas.
Con la ayuda de su hermano “Charles Wallace” –Deric McCabe– y su amigo “Calvin” –Levi Miller–, “Meg” tendrá que encontrar la forma de unir a su familia trayendo a su padre de regreso a la Tierra, aunque para eso tendrá que luchar contra una fuerza oscura denominada “Aquello”. Es curioso que a pesar de que Storm es la protagonista, son sus coestelares Deric y Levi los que tienen más empatía, por mucho le roban cámara la chica.
Pero en esta aventura “Meg” y compañía no se lanzan a la búsqueda así porque sí, los tres niños cuentan con la guía de tres brujas que los estarán impulsando y advirtiendo de los obstáculos que se encontrarán a su paso, ellas son «Señora Cuál» –Oprah Winfrey– «Señora Qué» –Reese Witherspoon– y «Señora Quién» –Mindy Kaling–.
Tres súper actrices que también están regias en sus papeles, por mucho el filme se sustenta gracias a ellas, pues sus personajes son los que brindan ese toque de fantasía y misterio que te llevan a seguir indagando en este universo tan extraño e interesante, además el maquillaje y el vestuario gozan de una estética increíble, trabajo del diseñador de vestuario Paco Delgado y el maquillaje de Allan A. Apone y Anita Brabec.
Es una buena película para ver en familia, más no creo que llegue a ser tan memorable como la novela que fue escrita a finales de los años 50 y publicada en los inicios de los 60 y que según entiendo tiene una legión de fans.